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La fiesta del Redentor English Français deutsche Italiano
 
 
15-16 julio 2006


Fuegos artificiales

El Redentor es una de las festividades que los venecianos sienten con mayor fervor, en la cual convive también el aspecto turístico, gracias al fantasmagórico espectáculo pirotécnico nocturno que atrae a miles de visitantes.
 
  La función solemne presidida por el Patriarca, a la izquierda el Alcalde
Cae el tercer domingo del mes de julio, día en que tienen lugar las santas misas, la función solemne presidida por el Patriarca y la procesión religiosa.
 

El Canal Grande iluminado por los fuegos artificiales

Pero el momento crucial es ciertamente la noche del sábado: en el inimitable escenario de la Cuenca de San Marcos, juegos de luces y de reflejos trazan un caleidoscopio de colores que se recortan detrás de los pináculos, las cúpulas y los campanarios de la ciudad.


El fin de semana se concluye con la Regata en góndolas.

 







Giovanni Grevenbroch, Sepultureros   La peste
En el trienio 1575-1577 la República Serenísima fue azotada por el flagelo de la peste: favorecida por la altísima concentración de habitantes, la plaga cundió largamente y causó muchísimas víctimas: casi 50.000, más de un tercio de la población.


El voto
El Senado, el 4 de septiembre de 1576, deliberó que el Dux tenía que pronunciar el voto de erigir una iglesia dedicada al Redentor, con el fin de que intercediera para poner fin a la pestilencia. Cada año la ciudad rendiría honor a la basílica, el día en que se declarase libre del contagio.
  Alessandro Varotari, El dux Alvise Mocenigo arrodillado ante el modelo del Redentor

Giuseppe Heinz, Procesión del Redentor   El final de la pestilencia
El 13 de julio de 1577 la pestilencia fue declarada definitivamente debelada y se decidió celebrar la liberación de la peste el tercer domingo del mes de julio, con una celebración religiosa y una fiesta popular.

El Redentor en la actualidad
En la puesta de sol las embarcaciones adornadas afluyen a la cuenca de San Marcos y al Canal de la Giudecca. En barca se consume una cena a base de platos de la tradición veneciana, en espera del espectáculo pirotécnico, que empieza las 23.30 y dura hasta bien pasada la media noche.
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